LA RESPONSABILIDAD DE COMUNICAR EN EL CONTINENTE DIGITAL

Gildasio Dos Santos Mendes, SDB Consejero para la Comunicación Social

Queridos amigos y amigas,

Con un click se entra en el universo de internet: un continente poblado por casi 4.8 millones de usuarios, de acuerdo con las estadísticas recientes sobre su crecimiento en el mundo.

¡Seamos parte de este continente digital! Un continente formado por seres humanos de todas las culturas, etnias, múltiples confesiones religiosas y tendencias políticas.

Navegar en este continente digital en donde todos estamos conectados entre nosotros requiere atención y responsabilidad.

Somos responsables de todo lo que escribimos y publicamos en Internet y en las redes sociales.

Con una lista de direcciones y números de celulares podemos en las redes sociales llegar virtualmente a cientos de miles de personas con los escritos que compartimos. Cuando escribimos algo a nombre propio somos responsables delante de todos de lo que publicamos.

Comunicar virtualmente pide una constante atención a nuestra privacidad, seguridad y autoridad.

Así, cuando comunicamos y compartimos información de parte de una institución que representamos, tenemos siempre que poner atención a transmitir los valores y la misión de la institución, además de garantizar su imagen, la credibilidad y transparencia.

El continente digital es un ecosistema social y cultural que nos ofrece grandes oportunidades para estar conectados con las personas y tener acceso al mundo de la cultura, de la economía, de la política, de las instituciones y de la religión.

El continente digital nos desafía hoy a ser comunicadores de los valores de la vida, de la verdad y de la esperanza

El mundo digital nos desafía a emplear relaciones de humanidad, de solidaridad, para construir la hermandad humana entre todos los pueblos y las naciones

Un modo para expresar nuestra responsabilidad ética es promover la solidaridad digital.

Esto significa que tenemos la misión de trabajar para la inclusión digital, de manera que todas las personas tengan el derecho de comunicar, de usar las redes para su formación, para su ingreso del mundo del conocimiento, del trabajo, de las relaciones humanas, de sus grupos y de la propia comunidad.

La ética en el mundo digital y en las redes sociales es fundamental para asegurarnos a nosotros y a los demás destinatarios, una comunicación que eduque al sentido de la vida, al empeño por la persona humana y la sociedad.

Cada comunicación es una relación con el otro. Comunicar en el ambiente digital con responsabilidad significa expresar nuestra humanidad y nuestras raíces culturales. Es vivir los ritos ordinarios de la vida cotidiana y asumirnos el empeño hacia la realidad que nos circunda, es crear comunión, servir a los otros y vivir la gratuidad.

Tenemos la responsabilidad como educadores y evangelizadores de jóvenes, de estar presentes en este continente con creatividad e identidad salesiana.

En este nuevo areópago vivimos y construimos relaciones como comunicadores y pastores de jóvenes, con espíritu de gratuidad y disponibilidad pastoral.

En la propuesta programática de la congregación salesiana, el Rector Mayor padre Ángel Fernández Artime, presenta muy bien la importancia de estar presentes en este continente, teniendo un estilo salesiano.

“La presencia hoy toca también el mundo digital, un verdadero ‘nuevo Areópago’ para nosotros, un hábitat de los jóvenes de hoy. También aquí debemos estar presentes con una clara identidad salesiana, con el deseo de llevar el anuncio de la Buena Nueva, simplemente con la alegría y sencillez de los discípulos del Señor.

Inspirados en nuestro padre Don Bosco, caminamos al paso con los tiempos.

Es el mundo digital que nos desafía y nos invita a ser creativos e innovadores para estar presentes en la nueva morada de los jóvenes. Este es un don y una responsabilidad para todos nosotros los salesianos, educadores y comunicadores.

Con afecto fraterno y en comunión de oración,


Porto Alegre, Brasil, 24 Septiembre, 2020